Estamos en el duodécimo día del confinamiento. Sobran las palabras, las quejas, las angustias y la tristeza. Hay que mirar hacia delante y dar las gracias por estar vivo!!!

Desde aquí y viendo la cantidad de gente que enferma y que muere no debemos desfallecer y sí dar las gracias por aguantar y ayudar a contener esta pandemia que tanto sufrimiento está generando.

A los que estáis enfermos y seguís luchando, ¡ánimo! Vamos a salir todos reforzados y vamos a luchar por generar, después, un mundo diferente y más humano.

Hoy os traigo una receta de pesto. Me gusta mucho el pesto… el tradicional de albahaca, pero voy haciendo otras recetas con diferentes hojas verdes. El de rúcula me encanta especialmente. Lo hago con almendras o nueces, hoy lo he hecho con almendras, básicamente, por que lo que ha sobrado lo voy a usar con otra preparación mañana y el de nueces no aguanta bien la cocción. Hace mucho que no hago con piñones, que es la receta tradicional, pero son tremendamente caros en la zona donde vivo y con otros frutos secos queda buenísimo también.

PESTO DE RÚCULA

INGREDIENTES:

• 3/4 taza de almendras repeladas
• 1 bolsa de rúcula (de las de supermercado, suele haber cantidades similares)
• 3/4 taza de aceite de oliva virgen extra
• 2 dientes de ajo
• 2 cucharadas colmadas de levadura nutricional
• 1 cucharadita de sal

PREPARACIÓN:

Se trata de triturarlo todo y ya tá!!! Pero también depende de como os guste. A mi me gusta que la almendra no quede muy fina, por lo tanto lo trituro todo junto Si no queréis encontrar trocitos de gránulos de almendra, pues mejor triturar la almendra sola, al principio y luego añadir el resto de ingredientes. Eso va a gusto…

Con estas cantidades queda estupendo en cuanto a proporciones de ingredientes, pero muchas veces lo hago a ojo… Es lo mismo que la cantidad de ajo. Para algunos gustos, les bastaría con 1 sólo diente de ajo. A mi me gusta cargado!!!

Espero que os guste la receta.

No os olvidéis compartir y muchas gracias por la visita al blog!!!