Este post lo escribí la segunda semana de confinamiento, pero lo dejé en borrador esperando resultados más palpables de mis experimentos con el jabón y os puedo comentar que me he vuelto loquilla…
Ahora os dejo con el post original y seguimos… y os iré contando…
El post de hoy trae muchas novedades. Primero, no se trata de una receta de comida como siempre, si no de algo que llevaba tiempo queriendo hacer y que estos días me he decidido a probar…Jabón natural casero.
La segunda novedad es que me decidí también a grabar un vídeo y subirlo a Youtube.
Con los medios que tengo y mi poca experiencia no ha salido nada para echar cohetes, pero estoy satisfecha por que esto es una puerta a explorar ese mundo y ver que a pesar de todo, soy capaz de hacerlo.
La idea del jabón natural la tenía siempre en mente cuando tenía que llevar a reciclar aceite de cocina usado y una buena amiga que se está interesanto últimamente por el mundo «zero waste» y lo intentó hace unas semanas, aunque que en su primer intento no le salió bien (seguro que le saldrá bien en el próximo), me animó a probarlo yo también (dios, la envidia es mu mala!!!! jajaja)
El primer intento fue el lunes 23 de marzo por la mañana con aceite reciclado de cocina. La verdad es que me salió súper bien y a la primera, y ahora, que han pasado ya unos días, veo que está curando muy bien.
El martes volví a hacer otra prueba, esta vez con aceite de almendras dulces. Y aunque la traza no quedó tan ligada, seguí adelante. Esa vez lo puse en un tupper para después poder cortar e hice un error, en lugar de dejarlo fuera, para que se secara y cuajara antes, lo entré dentro de casa y con el ambiente cálido ha tardado más de día en poder desmoldar.
La tercera prueba, la del vídeo, y cuya receta os voy a dejar aqui, está también a punto de desmoldar, por lo cual subiré el post cuando lo tenga desmoldado y podáis ver el resultado final.
Vamos a por la receta!!!
JABÓN DE ESPIRULINA, SÁNDALO Y GERANIO
INGREDIENTES:
- 150 grs de agua
- 470 grs de aceite de almendras dulces
- 60 grs de sosa cáustica
- 1 cucharadita bien colmada de polvo de alga espirulina
- aceite esencial de sándalo (2 goteros)
- aceite esencial de geranio ( 2 goteros)
MATERIALES A USAR
- Guantes (importante)
- Báscula
- Una jarra de plástico
- 1 Cuchara de madera
- 1 Batidora de brazo
- 1 Termómetro de cocina (opcional)
- 1 molde (puede ser de silicona de pasteles o un tupper o un brick de leche…)
PREPARACIÓN
Calentar un poco el aceite. Lo ideal sería que estuviese sobre 40º, pero yo no tengo termómetro de cocina y simplemente me limité a mi apreciación tocando el cazo con las manos. Este paso no lo dije en el vídeo, sorry, error de novata…
En un lugar bien ventilado o en la cocina con la campana extractora puesta y siempre con guantes!!!, mezclamos la sosa con el agua y removemos hasta que la sosa esté bien disuelta. Añadimos el aceite tibio y seguimos mezclando con la cuchara de madera. cuando vemos que va alcanzando consistencia y que está bien ligado sacamos la cuchara y batimos con la batidora de brazo empezando siempre desde el fondo y subiendo poco a poco para evitar salpicaduras. NO OLVIDÉIS QUE LA SOSA ES MUY CORROSIVA!!!
Cuando vemos que va espesando cada vez más sólo nos queda añadir el resto de ingredientes. Seguir batiendo con la batidora hasta que esté todo bien integrado.
Verter en el molde y……paciencia!!!!
A las 24-48 horas lo podréis desmoldar. Después hay que dejar entre 4 y 6 semanas para que cure el jabón. Durante este tiempo no puede usarse porque la sosa no se ha neutralizado todavía y sigue siendo «cáustica». No os olvidéis!!!
Evitad hacer esto con niños cerca, para evitar accidentes innecesarios!!!
Si os ha gustado no olvidéis compartir!!! Se aceptan críticas!!!
Y no os olvidéis contarme si lo hacéis!!!