Las vacaciones terminaron, ya estamos avanzando, muy poco a poco, el mes de septiembre y os traigo novedades, una recetita y algunas reflexiones.

Siempre intento que las vacaciones sean un punto y aparte. Que la vuelta a las rutinas sean positivas y que el período de descanso me aporte al nuevo período laboral, mejoras en mi día a día. Está claro que los buenos propósitos nunca duran demasiado tiempo, pero se intenta, claro que sí.

El calor no cesa, y es, para mí concretamente, algo que me crispa profundamente. Soy consciente que en verano me transformo, que no soy la persona alegre del resto del año y paso a ser insoportable.

La escapada a Oslo fue medicinal. Pasar de quererte arrancar la piel a tiras por el calor húmedo de Mallorca, a tener que tapaste por las noches fue balsámico. Descubrir la cultura del respeto, la limpieza de las calles y la convivencia ciudadana fue una cura momentánea a mi estado de crispación.

La dura realidad sigue aquí, en Mallorca. Calor, tráfico imposible, prisas, desilusión y desgana… Aquí estamos de nuevo, luchando.

Intentas seguir el ritmo de cocinar sano, entrenar y cumplir con tus obligaciones. Y en esas estamos…

Hoy os traigo una receta muy «de mi casa». Receta de mi infancia, con toques de aprovechamiento, receta barata y rápida. Te ha sobrado un poco de salsa de tomate, haces un sofrito y le pones dos huevos. El punto sofisticado lo aporta ese toque de pesto.

SARTÉN DE HUEVOS

INGREDIENTES:

• 1 Taza de salsa de tomate
• 1 Cebolla (no muy grande)
• 4 ó 5 champiñones
• 2 dientes de ajo
• 2 huevos
• AOVE
• Perejil
• Sal y pimienta
• Pesto

PREPARACIÓN:

En una sartén poner un chorrito de aceite. Cortar la cebolla en juliana y los champiñones y los dientes de ajo en láminas. Sofreír brevemente la cebolla con una pizca de sal. Añadir el ajo y los champiñones. Agregar la salsa de tomate, bajar el fuego y añadir los huevos cuando la salsa empiece a cocer. Dejar que lo huevos se hagan y salpimentar. En el momento de servir añadir pesto al gusto.

Disfrutar…

Y después de muchos años sin tinta, demasiados… por fin, me hice un cover para tapar algo que ya no correspondía en mi piel…