Los que me conocen, saben que los frutos secos están presentes en mi alimentación diaria. Siempre en crudo, sólos o en forma de barritas o como me resulta más fácil y menos laborioso, en forma de bocaditos o bolitas, del tamaño de una nuez (con cáscara), que normalmente elaboro semanalmente, o bien para llevar al trabajo, para desayunar o como snack en momentos puntuales.

Son tremendamente energéticos, y me proporcionan energía (de la buena, sin picos de glucemia) durante muchas horas.

He ido haciendo diversas combinaciones, con distintos ingredientes que siempre me han gustado mucho, sin embargo, la combinación ideal, para mí, es la que os presento a continuación.

INGREDIENTES:

• 1 taza de almendras repeladas.
• 1 taza de nueces peladas
• 1 taza de copos de avena
• 1 taza de dátiles naturales deshuesados
• 3 cucharadas de algarroba en polvo
• 1 cucharada de canela en polvo
• 1 pizca de sal

ELABORACIÓN:

Para su elaboración necesitas un robot de cocina potente. No es necesaria mucha velocidad, pero sí potencia, no sólo para triturar, si no para que el fruto seco saque sus aceites que es como vas a compactar las bolitas. Te recomiendo unos 2 minutos, parando un par de veces para remover e ir bajando lo que se va amontonando en las paredes del vaso. Cuando notas que la cogiendo un poco del triturado y apretando se compacta, ya está listo.

La duración en óptimas condiciones, en nevera y en un táper hermético es de 1 semana.

Esta combinación de ingredientes (almendras, nueces, copos de avena y dátiles) es una combinación ideal. Puedes cambiar los frutos secos, y los complementos (cacao, cúrcuma etc…)

Experimenta!!!

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